Ayudarán a determinar las direcciones de los vientos del Planeta Rojo
Los científicos se han dirigido al público, invitando a voluntarios para que ayuden a compilar un mapa de los vientos de Marte.
A los que deseen aportar a la investigación de Marte se les propone buscar depósitos de polvo sobre la superficie del Planeta Rojo en imágenes proporcionadas por el satélite MRO. Millones de imágenes marcianas están colocadas en la página Planet Four, que forma parte del proyecto internacional zoouniverse.org. A los voluntarios se les ofrece un tutorial rápido para registrar esos fenómenos, que de vez en cuando son hallados en el equivalente marciano del Círculo Polar Ártico. Cada invierno marciano esta región de Marte se cubre con una capa de dióxido de carbono congelado.
El hielo translúcido permite penetrar los rayos solares, que con la llegada de la primavera calientan la superficie y convierten el hielo en gas desde el fondo. Con el tiempo la creciente presión produce rupturas en la capa, que abren paso al gas acumulado bajo el hielo. Durante su escape el gas se lleva el material erosionado de la roca que va con el viento y después desciende para formar depósitos en forma de abanico. Identificar estos depósitos permitirá a los científicos determinar las direcciones de los vientos y compilar un mapa del tiempo de los últimos años en ese planeta.
fuente, actualidad.rt
Los científicos se han dirigido al público, invitando a voluntarios para que ayuden a compilar un mapa de los vientos de Marte.
A los que deseen aportar a la investigación de Marte se les propone buscar depósitos de polvo sobre la superficie del Planeta Rojo en imágenes proporcionadas por el satélite MRO. Millones de imágenes marcianas están colocadas en la página Planet Four, que forma parte del proyecto internacional zoouniverse.org. A los voluntarios se les ofrece un tutorial rápido para registrar esos fenómenos, que de vez en cuando son hallados en el equivalente marciano del Círculo Polar Ártico. Cada invierno marciano esta región de Marte se cubre con una capa de dióxido de carbono congelado.
El hielo translúcido permite penetrar los rayos solares, que con la llegada de la primavera calientan la superficie y convierten el hielo en gas desde el fondo. Con el tiempo la creciente presión produce rupturas en la capa, que abren paso al gas acumulado bajo el hielo. Durante su escape el gas se lleva el material erosionado de la roca que va con el viento y después desciende para formar depósitos en forma de abanico. Identificar estos depósitos permitirá a los científicos determinar las direcciones de los vientos y compilar un mapa del tiempo de los últimos años en ese planeta.
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