Científicos se lo preguntaron y lo lograron la respuesta. Para ello hicieron que diferentes personas oyeran 74 grabaciones.
Dormís un sábado y te levanta una obra en construcción o alguien, mientras come, raya mucho el tenedor contra el plato. Estos podrían tranquilamente ser los sonidos más odiados por muchas personas, pero no son los peores de todos. Un grupo de científicos llegó a la conclusión de que el peor es el de un cuchillo contra una botella. El estudio consistió en someter a 13 personas a escuchar 74 grabaciones mientras se medía la actividad cerebral con un escáner de resonancia magnética. De esta manera pudieron medir la molestia que les generaba.
El resultado reveló, según explica The Telegraph, que el peor sonido del mundo para un ser humano es el de un cuchillo contra una botella de vidrio, seguido por un tenedor contra un vidrio y una tiza sobre un pizarrón. Los sonidos en cuestión provocaban una respuesta más fuerte en el cerebro de los estudiados mientras que otros como el agua corriendo o el viento causaban bienestar. ¿Por qué? Porque estos sonidos tienen una frecuencia de entre 2 mil y 5 mil Hz. En estos rangos el oído de una persona se vuelve más sensible y se hace difícil de soportar.
fuente, aimdigital
Uno de los ruidos mas molestos del mundo.
Dormís un sábado y te levanta una obra en construcción o alguien, mientras come, raya mucho el tenedor contra el plato. Estos podrían tranquilamente ser los sonidos más odiados por muchas personas, pero no son los peores de todos. Un grupo de científicos llegó a la conclusión de que el peor es el de un cuchillo contra una botella. El estudio consistió en someter a 13 personas a escuchar 74 grabaciones mientras se medía la actividad cerebral con un escáner de resonancia magnética. De esta manera pudieron medir la molestia que les generaba.
El resultado reveló, según explica The Telegraph, que el peor sonido del mundo para un ser humano es el de un cuchillo contra una botella de vidrio, seguido por un tenedor contra un vidrio y una tiza sobre un pizarrón. Los sonidos en cuestión provocaban una respuesta más fuerte en el cerebro de los estudiados mientras que otros como el agua corriendo o el viento causaban bienestar. ¿Por qué? Porque estos sonidos tienen una frecuencia de entre 2 mil y 5 mil Hz. En estos rangos el oído de una persona se vuelve más sensible y se hace difícil de soportar.
fuente, aimdigital
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